Turismo genealógico
Conocer lugares gracias a los antepasados Cuando la genealogía se convierte en la excusa para viajar Actualmente, existen muchas opciones para disfrutar de un tiempo de vacaciones. Ciudad, playa, montaña, viajes largos, otros más cercanos, opciones culturales y también deportivas son los ganchos para preparar las maletas y disfrutar de unos días. Pero existe una opción que une estos atractivos con una cuestión que, para algunos, es también sentimental: la genealogía. Todo comienza cuando una persona pretende investigar de dónde procede, es decir, sus antepasados. Los primeros pasos consisten en recopilar la información oral y familiar. En este sentido, según sea la memoria familiar, se pueden avanzar dos o más generaciones, por lo menos en cuanto a nombres. Otra cuestión son las fechas, más difíciles de recordar para los mayores de la familia, convertidos en la fuente de información. Lavadero Font de Dalt, Orba. A continuación, con la información obtenida, empieza la